Una de las obras más agradecidas en el hogar es la de instalar armarios empotrados. En la gran mayoría de las casas modernas los armarios empotrados ya están incluidos en las habitaciones o al menos existe un hueco para que se puedan construir.

Si tu miedo respecto a los armarios empotrados es que no combine bien con el resto de la habitación debes de saber que puedes darle acabados personalizados y que generalmente van a juego con el suelo y con las puertas de paso de la vivienda, por lo que siempre están integrados en el conjunto y se ven bien.

1. Ganar espacio

Los armarios empotrados permiten ganar mucho espacio en la habitación, porque se adaptan a los huecos que haya. Pero también permiten ganar mucho espacio en lo que es el interior del armario porque va desde el suelo hasta el techo pudiendo aprovechar todos los rincones.

La habitación se ve mucho más grande y con una forma más bonita cuando cuenta con un armario empotrado, consiguiendo hacer que incluso dormitorios pequeños se vean más amplios y menos abarrotados.

2. Mayor nivel de personalización

Los armarios empotrados permiten un gran nivel de personalización impensable en un armario convencional. Se puede diseñar el interior a la conveniencia de cada persona para que tenga exactamente lo que necesita.

Por ejemplo, un armario empotrado puede estar realizado totalmente con estantes si su lugar es el pasillo y se quiere utilizar para los textiles de hogar, como la ropa de cama o las toallas. Por el contrario, si se pone en una entrada, puede ser exclusivamente para colgar abrigos y para poner el calzado, por lo que solo tendría barra y zapatero. En definitiva, lo que cada uno desee.

3. Cambiar el dormitorio es ahora más fácil

Renovar el dormitorio cuando el armario es empotrado es mucho más sencillo porque solo hay que cambiar el cabecero y las mesillas. Por ejemplo, se puede quitar un viejo cabecero con las mesillas anticuadas y colocar un moderno cabecero con mesitas integradas que hace ganar todavía más espacio.

Lo más caro de un dormitorio es un armario y a nadie le gusta que sus mueble de la habitación no combinen. Con el armario empotrado ya solo quedan los elementos más baratos, por lo que no da pereza cambiar de habitación y renovarla cuando apetezca hacerlo o se haya pasado de moda.