Los edificios de las ciudades a menudo están construidos con paredes de cristal. Es un material vanguardista que ofrece una gran espectacularidad estética pero entraña complejas dificultades a la hora de su limpieza de cristales en altura.

Estos trabajos deben llevarse a cabo por profesionales del sector como www.proliser.com cuyos operarios tienen la formación y la experiencia probadas. De común son las que establecen con sus clientes las características de su contrato de servicios dentro de un plan de mantenimiento o solamente para la limpieza de los mismos.

Hoteles, edificios de oficinas, comunidades de vecinos y construcciones urbanas modernas y antiguas tienen necesidad de mantener sus superficies de cristal en buenas condiciones. En parte como sistema de limpieza pero también como conservación y mantenimiento. Pero la altura de estas paredes en cortina y otras soluciones arquitectónicas, suponen la búsqueda de empresas especializadas que, superados los 15 y 20 metros en los que las pértigas proporcionan la limpieza desde el suelo, faciliten los medios de realizar los trabajos a partir de ahí.

Las pértigas, telescópicas y modulares, sin embargo son las herramientas más utilizadas. Sus ligeros materiales como la fibra de carbono, híbrida y la fibra de vidrio, favorecen el manejo desde el suelo, están estudiadas a conciencia para ofrecer la máxima flexibilidad en cada tramo, siempre según los trabajos verticales a realizar. Se les adaptan cepillos de calidad de púas direccionales y diferentes tipos de cuellos para el acceso de poyetes de ventanas, viseras o parasoles que pudieran encontrarse.

Porque además de la altura, se añaden localizaciones arquitectónicas de difícil acceso, como las claraboyas, los pórticos de cristal y los tragaluces que pueden resultar dañados si no se realizan correctamente las labores contratadas. Ya sean en edificios modernos o antiguos y clásicos, si se requiere una limpieza cada determinado tiempo, se recurre a especialistas del sector para no incurrir en gastos mayores al no desempeñar estos trabajos con el cuidado que requieren el personal que no está capacitado para ello.

Y no solo eso, sino que las tareas de mantenimiento y de limpieza de cristales pueden resultar peligrosas en muchas ocasiones si no se conocen los métodos para realizarlas de forma eficiente y segura. Es por ello que los profesionales del sector reciben la formación necesaria y especializada en este tipo de trabajos ya que los accidentes por caída de objetos y personas son más habituales de lo que deberían.